concediéndose deseos
como dos enamorados,
que vaciaron sus manos
de desengaños y miedos
y de afecto las llenaron.
Calmaron con fresas su hambre
con vino su sed
y el frío con su calor,
y el sueño venció
la mañana volvió
y pensaron los dos.
Qué habrá tras tu mirada,
que tanto oculta y tanto da
vuelve a la cama a soñar,
que amor que mucho piensa
verás como comienza,
y entonces pronto acabará
la flor de la mañana hoy,
sembraste en mi ventana
fingiendo que fingías,
que me amabas.
Y prometieron locuras
y cumplieron las promesas
y se derramó ternura,
y confundieron sus cuerpos
en un solo abrazo largo
como dos enamorados.
(Letra y Música: Nacho Mañó)
Canta: Presuntos Implicados
1 comentario:
Tarara, tarara, tarara, tarara....
Tarara, tarara, tarara, tarara....
¡Qué bien suenan las canciones viejas en compañía de los amigos!
Publicar un comentario