lunes, 26 de marzo de 2007

Laberinto

No habrá nunca una puerta. Estás dentro
y el alcázar abarca el universo
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
tendrá fin. Es de hierro tu destino
como tu juez. No aguardes la embestida
del toro que es un hombre y cuya extraña
forma plural da horror a la maraña
de interminable piedra entretejida.
No existe. Nada esperes. Ni siquiera
en el negro crepúsculo la fiera.

Jorge Luis Borges

viernes, 23 de marzo de 2007

Ya ves


Musica y letra: Ismael Serrano

Ya ves, a veces me canso de ser hombre y también
me agota escuchar que todo va bien,
y ver tristes hombres mirando al sur,
y no existir si no me miras tú.

Ya ves, a veces me canso de perderte y saber
que estamos solos y no va a volver
Guevara para darme la razón
de no verte tendida en mi colchón.

Y mientras tanto,
estrépito de andamios,
pateras y naufragios,
desvelan nuestro sueño.
Y mientras tanto,
si hoy se cae La Habana,
¿el día de mañana
quién será nuestro dueño?

Así yo canto para recordar
que sigues a mi lado,
que aún sueñas despierta porque así
vencemos el cansancio.
Así yo canto para recordar
que aún seguimos vivos,
si no ves más allá de tu horizonte
estaremos perdidos.

Ya ves, a veces me canso de ser libre, de ser
libre para venderme y caer
muerto donde mi libertad prefiera,
siempre al otro lado de tu frontera.

Ya ves, a veces me canso de mí y de no tener
valor para buscarte y cometer
todo delito que este amor exija.
"Quieta ahí, tus labios o la vida".

Y mientras tanto,
estrépito de andamios,
pateras y naufragios,
desvelan nuestro sueño.
Y mientras tanto,
si arde Lacandona
si Marcos abandona,
¿quién será nuestro dueño?

Así yo canto para recordar
que sigues a mi lado,
que aún sueñas despierta porque así
vencemos el cansancio.
Así yo canto para recordar
que aún seguimos vivos,
si no ves más allá de tu horizonte
estaremos perdidos.

lunes, 19 de marzo de 2007

Sigue las instrucciones:



¡Ojo!, el verbo consumir le ha robado la ropa a otras palabras, no caigas, ¡Piensa!

En estos días las palabras tienen turbios significados, la mentira titila en vitrinas y luces de neón, es preciso despojarlas de su farsa, desgarrar sus ropas prestadas y mirar por dentro, descubrirás algo simple, con frecuencia dicen: “Se vende”, “cómprame”, “no eres nada ni nadie si no tienes”… esfuérzate en ver su desnudez, no es difícil.

Pero no te amargues, mientras tanto, o en el acto, disfruta de estar contento, sueña, añora, tu cuerpo es para sentir, este es tu tiempo, respira hondo, ¡VIVE!

Recuerda a Serrat: “No esperes a que el aire sea de pago para disfrutar el placer de respirar

domingo, 11 de marzo de 2007

Percutir

Cuenta la leyenda familiar que cuando yo tenía como tres años y mi hermano como cinco, nos llevaron a un desfile, había una banda de guerra y los dos marchamos felices al ritmo del pelotón marcial; la experiencia nos dejó tan impresionados que al regreso a casa ya teníamos definido nuestro destino: cuando grandes yo iba a ser “tamborero” y me hermano “pitaor”, esas nuevas palabras no se le olvidaron nunca a mamá aunque a nosotros se nos pasó el entusiasmo, es más yo no recuerdo esa experiencia, mis padres si, y desde luego incumplimos la promesa.

El cuento es que mientras crecimos en mi helado pueblo reincidimos en varias ocasiones en nuestros proyectos musicales, recuerdo una vez que nos ganamos una pela porque montamos nuestra propia batería, desde luego, la de cocina, el caso es que le apachurramos las tapas a unas ollas de mi mamá y le hicimos unos cuantos chichones a los respectivos recipientes, nos costó unos correazos pero pasamos de lo lindo, no me acuerdo del dolor, sino de la alegría.

De niño yo le daba a todo, creo que así son todos los niños, oía el caer del agua en el tanque del patio porque la canilla estaba mala y le ponía cositas para que sonara distinto, la cuchara y el plato, el lápiz y la mesa del comedor eran mis instrumentos musicales cotidianos mientras hacía las interminables tareas y lo mejor: machacar tapas de gaseosa para hacer panderetas y otros objetos de “percusión menor”…

Eso es percutir, es sentir o inventar el ritmo, pero sobre todo jugar y divertirse.

Volví a sentir esa fascinación por la percusión anoche, con las explosiones y metrallas de sonidos rítmicos, la felicidad del juego, la risa fácil de niño que nos arranca por más seriote que uno ande con sus cosas de adulto, la magia de la danza y la luz parpadeante y sincronizada como una baqueta más en las manos de un genio del ritmo.

Si pueden, no se pierdan MAYUMANA, eso es sencillamente ¡EXTRAORDINARIO!

P.D: Entre los 5 o 6 amigos que eventualmente leen este “coso” hay una batera, espero no te enojes si mi descripción es ofensivamente simple, de verdad pienso que la percusión es un arte, solo una artista sabría decirlo apropiadamente: VOS

miércoles, 7 de marzo de 2007

Mujer


http://exigeant.canalblog.com/archives/p10-10.html

martes, 6 de marzo de 2007

La historia veridica de un ladrón...

Leala en PALABRAS PALA

Caminar y caminar

¿Hace cuanto que lo hacemos?, en un área remota de una sabana llamada Laetoli, en el norte de Tanzania, unos científicos han conservado un emplazamiento arqueológico extraordinario, descubierto por Mary Leakey en 1976, esta extensión de ceniza volcánica endurecida contiene un sendero de huellas fosilizadas, cincuenta y cuatro pasos perfectamente preservados de tres homínidos, con una claridad increíble estas impresiones registran el paso de dos machos y una hembra por este terreno hace 3.5 millones de años, sabemos que el segundo macho avanzaba detrás de los otros porque pisó las huellas del primero borrando la impresión, ¡el primer registro de la caminata erguida!, nunca sabremos más de ellos, solo que por allí pasaron y dejaron huella.

Nuestras huellas en cambio son invisibles, bastará una generación, siendo optimistas, o algunos días después de nuestra muerte, siendo realistas, para ser parte del olvido, otros incluso son olvido antes de morir.

Lo que somos es la suma de toda la historia de la humanidad, somos hombres, la especie sobreviviente y cargamos en nuestros genes y en nuestra cultura rastros de todas las generaciones que nos precedieron.

Cuanto atavismos usamos a diario, cuanto hay de fieras en nuestro comportamiento cotidiano, cuanto del simple animal que se aferra a su existencia y reglas básicas: nacer, crecer, reproducirse y morir dejando la repetición del ciclo a su descendencia: sobrevivir.

Pero cuanto también tenemos de ese viaje interno, de ir a nuestros símbolos, nuestras ideas, temores y deseos, nuestras consciencia: preocuparnos por nosotros y por los otros, imaginar una trascendencia para justificar la conciencia de existir.

Caminaremos mucho más, por sendas de destrucción y vida, navegando y naufragando en mares de sangre y semen…

Esa es y será nuestra historia: vivir y morir - morir y vivir, ¿Hay otro camino?



Agustina dijo...

Lo triste es pasar por esta vida sin dejar huellas... y sin descendencia. Ahí una se cuestiona la razón por la que ha venido. Pero simpre habrá una razón por la cual te tocó vivir de esa manera.

Me dejaste pensativa con tu escrito.

Cariños.

07 de marzo.


PALA dijo...

Discrepo un poco -realmente mucho- de la opinión de Valentina.
La descendencia es un asunto pasional y vocacional. Justificar la existencia por la posibilidad de transmitir tus genes es, cuando mucho, postergar una generación más el olvido.
Mi bisabuelo es una fotografía brumosa de alguien que parte rumbo al olvido y lo está consiguiendo.
Caminar.
Vivir.
Amar.
Sólo eso justifica el presente, que es la eternidad.

Pala, me gusto mucho tu comentario y lo comparto, el escrito habla también del viaje interno y ahí es justo donde maravilla el existir: sentir, pensar, AMAR, eso también es un camino o un caminar, de hecho ese es nuestro real camino, ser más que una simple pieza biológica de una especie con tendencia a la autodestrucción.

Hoy tengo ánimos de refutarme: No es cierto que nunca sabremos nada más de esos que dejaron las huellas en Laetoli, ya me enteré de lo demás:

…Era un macho y una hembra que se amaban, se llamaron Tur y Zar, caminaban lentamente sobre la tibia ceniza mientras en la lejanía fulguraba la explosión del volcán Sadiman, la mirada enamorada de ella fulguraba como el fiero volcán, tomaba de la mano a Tur segura de que bastaba su peluda piel para espantar cualquier peligro, si seguían juntos nada les podía ocurrir… él solo pensaba en como hacerla feliz, la llevaría a ese claro del bosque donde había encontrado una deliciosa fruta que le quería enseñar, le bastaba con verla sonreír para ser feliz, sería capaz de cualquier cosa para seguir con Zar hasta el fin de sus días, nada les podría detener, ni los terremotos, ni las erupciones volcánicas o las bestias salvajes que solían perseguirlos, nadie podría contra ellos.

Lo que ignoraban es que alguien los miraba con mal brillo, era el envidioso Yik quien deseaba ardientemente a Zar desde que la vio y no soportaba verla junto al valiente Tur, los seguía a cierta distancia esperando su oportunidad… en su corazón germinaba la semilla del mal aunque para entonces no existieran las palabras…

lunes, 5 de marzo de 2007

Mesías


Los cinco viajeros del tiempo se mimetizan en el matorral, la emboscada está lista, sus fusiles de asalto esperan el paso del asesino del niño, alguien que será muy importante para la humanidad; el ataque se ejecuta con frialdad y sin vacilación, el cuerpo acribillado del asesino yace junto a su potente motocicleta.

Reporte: Misión cumplida, 0 bajas, Objetivo logrado.

Al regresar a su tiempo, cuarenta años después, el resultado es desastroso, es un presente terrible, aquel líder salvado cuando niño del ataque de un asesino motorizado es ahora un malvado tirano, hace veinte años gobierna con mano de hierro liderando su ejército de torturadores.

Los viajeros deciden volver y corregir el error, esta vez vigilan que el homicidio ocurra sin contratiempos, pero el asesino los detecta: asesina a la mujer a punto de dar a luz y luego, con rápidas ráfagas, elimina a cuatro de los cinco viajeros.

Reporte: Misión cumplida, cuatro bajas, Objetivo logrado.

A su regreso el comandante, único sobreviviente, observa horrorizado que anticipó diez años el régimen del tirado, salvo que el de ahora es aquel homicida que empezó su carrera matando una mujer embarazada y cuatro misteriosos desconocidos

sábado, 3 de marzo de 2007

¿Azar o destino?




La gente teme reconocer que parte tan grande de la vida depende de la suerte, da miedo pensar que sea tanto sobre lo que no tenemos controlMatch Point.

Solo un genio morboso como Woody Allen puede retratar tan perfecto crimen y hacernos disfrutar en el trance; pero más allá de disfrutar de un inteligente guión me queda rondando una idea… ¿Es la suerte la que reina en este lado del Universo?, cuando termino de ver Match Point me llama una amiga y me lee un texto de Ernesto Sábato:….

"… Ni el amor, ni los encuentros verdaderos, ni si quiera los profundos desencuentros, son obra de las casualidades, sino que nos están misteriosamente reservados. ¡Cuántas veces en la vida me ha sorprendido cómo, entre las multitudes de personas que existen en el mundo, nos cruzamos con aquellas que, de alguna manera, poseían las tablas de nuestro destino, como si hubiéramos pertenecido a una misma organización secreta, o a los capítulos de un mismo libro! Nunca supe si se los reconoce porque ya se los buscaba, o se los busca porque ya bordeaban los aledaños de nuestro destino.

... Así, en la vida uno muchas veces cree andar perdido, cuando en realidad siempre caminamos con un rumbo fijo, en ocasiones determinado por nuestra voluntad más visible, pero en otras, quizá más decisivas para nuestra existencia, por una voluntad desconocida aun para nosotros mismos, pero no obstante poderosa e inmanejable, que nos va haciendo marchar hacia los lugares en que debemos encontrarnos con seres o cosas que, de una manera o de otra, son, o han sido, o van a ser primordiales para nuestro destino...”(La Resistencia - Ernesto Sabato - pag. 28 - 29 )

¿Es el mismo azar el que me hace dudar de su propia existencia? ¿O es el “designio” quien manda que no pueda dormir por la hermana duda que hoy está borracha y con insomnio?

Igual, si es suerte o destino no tenemos control sobre ninguno de ellos, ejemplo: Es una vana ilusión el pensar que uno está predestinado a escribir o peor idiotez creer que el azar te puso un lápiz y un papel cuando dabas vuelta a una idea borrosa, si en todo caso no vale la pena esforzarse en escribir cuando no te sale

¿Azar o destino?, ¿Que es lo que puede juntar las incoherencias para que parezcan un plan perfecto o una idea lúcida?, tal vez la buena imaginación de un lector en “sano juicio”.

Como en la película, en la vida real los finales felices suelen ocurrir para los afortunados y no para los buenos, mientras la fe en la existencia de leyes universales que todo lo compensan no hace más que mantener las cosas en su “Estatu Quo” para beneficio de los malvados.

La resignación ante la injusticia es una idea que gusta mucho a las religiones y por eso debe ser que las religiones gustan tanto a los poderosos, pues les mantiene tranquilo el negocio mientras los demás esperan el suyo en el otro mundo.

viernes, 2 de marzo de 2007

Escritor desahuciado

“NO vale la pena esforzarse en escribir cuando no te sale”, me lo vengo repitiendo, en todo caso no creo que el talento se supla con la disciplina, aunque otros dirán que sí, hasta yo, con mejor animo, así que no esperen ninguna mejoría yo por lo menos no la espero.

Cantar y escribir se parecen, ya lo había dicho, tienen algo de orgánico, una verdadera necesidad fisiológica, como llorar o vomitar, uno canta sus tristezas y alegrías, uno escribe para sacarse de adentro eso que te arde y te quema, o para dejar testimonio de éxtasis, preguntas y certezas, decepciones o ilusiones…

¡Como vomitar o llorar!, así de necesario y de inútil: Alivia la presión aunque nada cambie, después que sale… se siente un fresquito.

Este acto de exhibicionismo, permitido por la gracia de la todopoderosa fuerza virtual de la web, nos da la opción a los escritores desahuciados, como la ducha y los amigos borrachos al cantor desahuciado, ¿y quien dijo que hay que saber para cantar?